Un día vi pasar a un hombre que tenía por ley el acento moral de la vergüenza, y me pregunté ¿será posible que ese hombre justo y generoso, de alguna manera pudiese redimir mi alma acorralada por las espinas del desamor?
Comandante Hugo Chávez Frías ¡larga vida! Tengo la edad de su Revolución, ya que a partir de ella puedo sin temor contar una historia, y declamarle a los molinos de viento alguna de mis quijotadas.
En una de esas encrucijadas donde la desesperanza golpeaba con brutal fuerza, de repente se apareció usted Comandante, y a través del retrato hablado de un ideal, localizó el humilde corazón de un pueblo avasallado.
El comandante Hugo Chávez Frías, ha emergido cual rayo fulgurante por entre las empinadas espesuras de la historia venezolana, para desempolvarla, y aclimatarla a las exigencias sociales y modernas del siglo XXI
Somos afortunados de tenerlo entre nosotros. Lo podemos ver y tocar, es vida que palpita. Como ser humano aprendió de los errores a contraponerse a los vientos que le desfavorecen, sin perder de vista jamás la humildad y el norte que sus virtudes le señalan. Es el mismo rayo que ayer le tocó la misión de romper las tinieblas por un instante, no para perderse en el vacío, si no para luego resurgir con más fuerza y brillo sobre el firmamento latinoamericano.
El Comandante y su patria
ResponderEliminar¿Quién no ha llorado de emoción por el que hoy recoge los ecos libertarios de Atahualpa, Tupac Amaru, Guaicaipuro y del Negro Primero?
La vergüenza
ResponderEliminarUn día vi pasar a un hombre que tenía por ley el acento moral de la vergüenza, y me pregunté ¿será posible que ese hombre justo y generoso, de alguna manera pudiese redimir mi alma acorralada por las espinas del desamor?
¡Chávez!
ResponderEliminarComandante Hugo Chávez Frías ¡larga vida! Tengo la edad de su Revolución, ya que a partir de ella puedo sin temor contar una historia, y declamarle a los molinos de viento alguna de mis quijotadas.
¡El mejor motivo!
ResponderEliminarEn una de esas encrucijadas donde la desesperanza golpeaba con brutal
fuerza, de repente se apareció usted Comandante, y a través del retrato hablado de un ideal, localizó el humilde corazón de un pueblo avasallado.
El Comandante y su patria
ResponderEliminarEl comandante Hugo Chávez Frías, ha emergido cual rayo fulgurante por entre las empinadas espesuras de la historia venezolana, para desempolvarla, y aclimatarla a las exigencias sociales y modernas del siglo XXI
El Comandante y su patria
ResponderEliminarSomos afortunados de tenerlo entre nosotros. Lo podemos ver y tocar, es vida que palpita. Como ser humano aprendió de los errores a contraponerse a los vientos que le desfavorecen, sin perder de vista jamás la humildad y el norte que sus virtudes le señalan. Es el mismo rayo que ayer le tocó la misión de romper las tinieblas por un instante, no para perderse en el vacío, si no para luego resurgir con más fuerza y brillo sobre el firmamento latinoamericano.